El equipo, desarrollado por investigadores de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Hong Kong, puede atar nudos en sólo 5 segundos, tres o cuatro veces más rápido si se le compara con su contraparte humana en este mismo tipo de trabajo, lo que mejoraría ostensiblemente la productividad en obra.
Poco a poco, el uso de robots en faenas específicas de un proyecto está transformándose en una realidad. En la tecnología de construcción con hormigón impreso 3D, por ejemplo, el hormigonado está a cargo de equipos automatizados los que, en la actualidad, demuestran una capacidad de impresión cada vez mayor. Sin embargo, estos no son los únicos “robots” que pueden aportar a la industria de la construcción con hormigón.
Estos equipos, que van desde “robots albañiles” a “pulidores”, llegando a proyectos enteros ejecutados por robots, poseen características distintas entre sí. Y si bien sus labores son diferentes, la idea de incorporarlos dentro de una obra tiene un fin que es común a todos: automatizar procesos para así, incrementar tanto la seguridad como -y quizás lo más destacado- la productividad en obra.
En ese sentido, investigadores de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Hong Kong (HKUST, en sus siglas en inglés) crearon un robot, precisamente, pensando en mejorar la eficiencia del sector a través de procesos automatizados. En este caso, el equipo desarrollado en esa casa de estudios permitiría atar barras de refuerzo de forma rápida y precisa.
Cómo mejorar metodologías constructivas con robótica
Si bien a primera vista este robot no parece tan sofisticado como, por ejemplo, los brazos extrusores de hormigón impreso 3D o los diseños que presentan firmas como Boston Dynamics, el equipo detrás de este desarrollo asegura, en un comunicado que publicó la HKUST, que cumple cabalmente con su propósito, que es elevar la eficiencia de la construcción a través de procesos automatizados.
“La industria de la construcción viene adoptando, a lo largo de siglos, principalmente métodos tradicionales para llevar a cabo los proyectos. Eso que me llevó a pensar nuevas formas de realizar construcción inteligente”, dijo Li Haozhen, candidato a doctorado de la HKUST y creador del robot.
De esta forma, Haozhen desarrolló el proyecto bajo la guía del Dr. Liang Haobo, director asociado del Centro de Robótica para la Construcción de la Universidad de Hong Kong (HKCRC, en sus siglas en inglés) y el desarrollo contó además con la supervisión del profesor Li Zexiang, un reconocido experto en robótica a nivel internacional del Departamento de Electrónica e Ingeniería Computacional de la misma casa de estudios.
Haozhen, en conjunto con el Dr. Haobo, desarrolló el robot bajo el alero del Programa Interdisciplinario Individualizado (IIP), y contó con un primer modelo en abril de 2024, el que presentó en la versión número 49 de la Exhibición Internacional de Invenciones de Ginebra, adjudicándose una medalla de oro y el reconocimiento del jurado, la más alta condecoración del evento.
Las funcionalidades del robot
El robot posee está equipado con un sistema automático de posicionamiento e identificación, además de sensores que le permiten evitar obstáculos de forma automática. Junto con eso, el robot es capaz de “discernir” de manera también automática si las barras de refuerzo corresponden a una columna u otro elemento, ajustando sus prestaciones para atar las varas de acuerdo con el tipo de estructura en la que se posiciona.
Respecto a la velocidad del robot, desde la HKUST informaron que puede atar un nodo en la intersección de las barras de forma precisa en sólo 5 segundos, lo que se traduce en la posibilidad de atar alrededor de 500 nodos por hora. Esto, de acuerdo con los cálculos de los investigadores, supera en tres a cuatro veces la velocidad en la que lo haría un operador especializado, en términos de eficiencia neta diaria.
“Esto no quiere decir que se reemplazará al componente humano de las obras”, subrayó Li Haozhen. “Lo que hará es ayudar a mejorar el desempeño. También, liberará al componente humano de un trabajo que es físicamente demandante, lo que también incrementará aspectos como la seguridad en obra”, agregó. Esto es especialmente significativo, ya que sólo en Hong Kong, la población activa se redujo en un seis por ciento entre 2018 y 2022, incluyendo una caída de más 160.000 trabajadores poco calificados.
Hasta el momento, el equipo informó que el robot se testeó en obras tanto en Hong Kong como en la ciudad de Shenzhen, aunque todavía no se conocen los resultados de esas pruebas de campo. En ese sentido, Li Haozhen adelanta que la idea es colocar el robot en el mercado durante el último trimestre de 2024.