El piso es la base de cualquier construcción, y cobra aún mayor importancia cuando se trata de espacios de alto tránsito e impacto, en muchos casos con maquinarias de alto tonelaje. Estos requerimientos de resistencia y durabilidad, propios de diversas áreas industriales, han llevado al desarrollo constante de tecnologías que cumplan sus objetivos. Hoy, los pisos de hormigón pulido o espejo se alzan como una excelente solución.
La técnica del pulido se aplica en pisos de hormigón y consiste en el desbaste de este material, mediante herramientas diamantadas, hasta dar un acabado liso, brillante y que requiere de un bajo costo de mantenimiento. Esta solución ha permitido recuperar hormigones con hasta 100 años de antigüedad.
Este tratamiento se realiza con maquinarias pulidoras con un kit de aspirado industrial que contiene muelas con impregnación de diamantes y silicatos. El proceso consta de 12 pasos de diamante, a través de los cuales se extraen las partes blandas del hormigón, llegando al árido fi no o grueso requerido.
Francisco Arauz, explicó que “se aplica silicato, que es un densificador, mezcla de litio, calcio y potasio, que se impregna en el hormigón bajando en promedio 1 cm. Esto cristaliza y sella, evitando la craquelación con el tiempo”.
Arauz destacó que el procedimiento realizado sobre el sustrato más duro del hormigón y su endurecimiento, a través de los silicatos, hacen que el piso obtenga un alto nivel de brillo y cristalizado que perdura. El piso queda protegido totalmente, y no suelta polvo.
Además de su larga vida útil, resistencia, calidad hidrófuga y durabilidad, tiene baja carga electrostática, por lo que no es conductivo. Junto con ello, es altamente ecológico, ya que su proceso utiliza sólo químicos orgánicos, y sus residuos pueden reutilizarse en plantas de hormigón.
Linda Montecinos, agregó que “una de las mejores características de estos pisos es la economía de su mantención, que requiere únicamente agua y abrillantamiento con pad. Sólo en casos especiales, por la naturaleza de las distintas industrias, se requiere además un vaculavado”.
La tecnología de los pisos espejo permite usos diversos desde la alta resistencia al alto tránsito de los estacionamientos, hasta la necesidad sanitaria de alta exigencia de la industria alimenticia. Su utilización también es apta para espacios de circulación de grúas horquilla y montacargas, porque posee excelente adherencia, incluso en pavimentos mojados.
La última tendencia en recuperación de pisos
Los pisos pulidos son una gran alternativa de remodelación, para ello, existen técnicas y maquinarias especializadas en el tratamiento de superficies complejas, como las maquinarias cepilladoras de hormigón que son capaces de rebajar hasta 0,7 mm por pasada. Esto es muy útil cuando los pisos están deteriorados y se requiere alisarlos para el pulido.
“El proceso de restauración se realiza a pisos de hormigón viejos o nuevos que se encuentran destruidos o mal instalados. Lo positivo de este trabajo es que no genera un trauma logístico, ni paralización de la productividad, porque se trabaja sobre el mismo sustrato, y se recupera exitosamente un piso que se creía perdido”, acotó Linda Montecinos.
El pulido es una solución cada vez más utilizada en suelos de hormigón con fisuras, hoyos o mal instalados. Hoy, además, es posible aportar diseño, ya que hay productos especiales para el piso espejo, que le otorga distintas tonalidades y colores de alta calidad y duración de más de 10 años, un tiempo considerable teniendo en cuenta el uso de los pisos mencionados.
Este moderno tratamiento al hormigón, indirectamente resulta ser un elemento de eficiencia energética, ya que su alto brillo favorece la luminosidad y reflexión, incidiendo en la reducción del uso de energía. Así es como un material de uso tradicional como el hormigón se renueva sumando múltiples beneficios, aportando además elegancia y modernidad impensadas.