Una serie de colinas artificiales dan forma a este gran parque de la ciudad de Durrës, ubicado donde se encontraba un antiguo relleno sanitario de esta ciudad de Albania. Para dar forma al paisaje, se utilizaron los mismos residuos sólidos para su construcción y un gran muro de hormigón dio soporte a su colina más alta, la que destaca entre una serie de elementos destinados para la ciudadanía.
Ubicada a orillas del mar Adriático, en la costa occidental de Albania y al oeste de Tirana, capital del país europeo, se encuentra la ciudad de Durrës. Se trata de la segunda urbe más grande de esta nación -tanto en población como en su aporte a la economía del país- y su fundación data de los tiempos de la antigua Grecia, por lo que se puede encontrar, entre construcciones industriales y modernas, vestigios tanto de esa época como de los imperios Romano y Bizancio.
Al igual que en su pasado como parte del Imperio Romano, Durrës es el puerto que conecta a Albania con Europa Occidental, principalmente por su proximidad a las ciudades italianas de Bari y Brindisi. De ahí que su actividad económica sea diversa, mezclando actividades industriales manufactureras con una marcada tendencia al turismo, con más de 600.000 visitantes por año.
En vista de eso, no es de extrañar que en esta ciudad albanesa se presenten problemas inherentes a grandes urbes. Por ejemplo, el manejo de residuos en grandes botaderos, los que finalmente representan un riesgo sanitario para toda la ciudad. Por esta razón, el estudio de arquitectura Casanova + Hernández recibió el encargo por parte del gobierno local de reformular un antiguo relleno que, justamente, representaba un problema sanitario para Durrës. ¿El resultado? Un gran parque público, bautizado como “Eco Park Durrës”.
Una nueva manera para abordar un problema medioambiental
El diseño de este parque publico se inspiró en un famoso mosaico de la era romana, conocido como “La belleza de Durrës”, el que, explicaron desde el estudio “sirve como una metáfora para la transformación de un espacio contaminado, con connotaciones negativas para la gente, en un espacio público para la recreación y la educación medioambiental”.
Dentro de las características que posee el parque, es que se formó con colinas artificiales fabricadas con los mismos residuos que existían en este relleno. En ese sentido, el estudio desarrolló una solución “no sólo desde el punto de vista técnico, lo que podría habría resuelto todo con una gran cerca alrededor del relleno sanitario. Se entendió que también se necesitaba una estrategia más compleja enfocada en resolver los problemas medioambientales, creando espacios públicos recreacionales para la ciudad y promoviendo la conciencia ecológica entre los ciudadanos”.
Así, el “Eco Park Durrës” se conformó como una solución para este importante problema medioambiental, el que abarcaba diversas áreas: residuos sólidos, la lechada que generó este residuo sólido que comenzó a contaminar el suelo, además de la contaminación en el aíre provocada por los incendios causados por la quema ilegal de estos mismos residuos para extraer materiales, principalmente acero, y la contaminación de las aguas, provocada por la dispersión de desechos en canales cercanos al relleno sanitario.
Transformando un espacio “perdido” con grandes colinas artificiales
Con una serie de colinas artificiales y espacios verdes, el “Eco Park Durrës” -que posee un área de 144.000 m2- funciona como un gran pulmón para toda la ciudad albanesa. Estas colinas, enfatizan los arquitectos, se construyeron con el mismo residuo sólido que existía en la zona, el que se movió, forjó y compactó para “dar forma a este paisaje artificial”, explicaron desde el estudio. Asimismo, las cimas de estas colinas se cubrieron con una geomembrana y una capa final de arcilla para el crecimiento de vegetación.
Uno de los aspectos más importantes del parque es su colina principal, la que posee un muro de escalada y que tiene como soporte un muro de 30 metros de alto de hormigón armado, el que “se diseñó con una forma curva para resistir de manera más eficiente las fuerzas. El muro de escalada se fabricó con paneles de GRP montados sobre una estructura de acero galvanizado”, detallaron los arquitectos en la descripción del proyecto.
Por las características de sus instalaciones, el “Eco Park Durrës” se transforma en un hito de la economía circular, al reducir, reciclar y reutilizar los propios residuos sólidos del antiguo relleno que existía en ese espacio para dar forma a este nuevo espacio público que beneficia a toda la ciudad. Tal es su importancia que el parque estuvo dentro de los nominados para los premios EUmies 2024, que galardonan a la arquitectura contemporánea en la Unión Europea.