“Casa Montecito”: Una casa circular de hormigón que apela a la sostenibilidad

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Inserta en una de las colinas de las afueras de Santa Barbara, esta vivienda de hormigón es el resultado de siete años de trabajo colaborativo entre el estudio de arquitectura Donaldson + Partners y sus dueños, dando como resultado una edificación casi subterránea que se inserta en el paisaje del sector, transformándose en un elemento más de éste.

Las características físicas de un espacio suelen definir la forma que tendrá el diseño arquitectónico del un proyecto o, al menos, inspira para el desarrollo de este. Ya sean paisajes costeros, montañosos o planicies, cada diseño busca ser reflejo de su entorno, ya sea emulando formas o adaptándose a estas, entregando así obras interesantes y llamativas.

Siguiendo esa línea, el proyecto que llevó a cabo el estudio de arquitectura Donaldson + Partners en las colinas que rodean al estado de California, en Estados Unidos, utiliza precisamente el entorno para dar forma a una interesante casa, cuyo diseño “se inspiró en la combinación de un espacio increíble y unos clientes visionarios, quienes impulsaron el diseño, cuyo resultado fue una casa que emerge desde y forma parte del paisaje, todo al mismo tiempo”, comentó Robin Donaldson al portal Dezeen.

La casa, bautizada como “Casa Montecito” -debido a su ubicación en ese vecindario al noreste de Los Angeles- posee una superficie cercana a los 1.000 metros cuadrados y destaca por que emerge sutilmente desde el interior de una colina, revelando su estructura circular completa. Junto con esto, el diseño contempló espacios interiores fluidos que sirven de balance al diseño en su conjunto.

Una vivienda de hormigón sostenible

El diseño circular de “Casa Montecito” se trabajó en conjunto entre el estudio y los mandantes del proyecto, una connotada pareja de coleccionistas de arte, para que la vivienda diese la sensación de “emerger desde la propia colina y se adentre en el paisaje”, destacó el arquitecto Robin Donaldson al portal Deezen.

“La combinación entre el increíble espacio y la visión de los clientes nos inspiró, como estudio, para innovar en el diseño, lo que resultó en una casa que emerge y, al mismo tiempo, forma parte del paisaje, que actúa como telón de fondo tanto para los ritmos de la vida diaria como para dos vibrantes prácticas artísticas y que redefine completamente lo que imaginamos que podría ser una casa”, comentó.

Asimismo, la inusual forma de esta casa de hormigón hace que se destaque entre las edificaciones vecinas. “Esta no es la única casa en la colina que existe”, comentó el arquitecto a la revista Elle Decor.

La particular forma de la casa se genera gracias a unos grandes arcos de hormigón parabólicos los que, en cierta medida, también definen la fachada de la vivienda. En ese sentido, el arquitecto explicó a la The Architect’s Newspaper que el hormigón era un material que siempre quiso utilizar en proyectos de este tipo, debido a su plasticidad, además de su probada resistencia contra incendios y terremotos.

El profesional agregó que, para el diseño de mezcla, se utilizó ceniza volante, por lo que, para este proyecto, además de buscar nuevas formas con el hormigón, hubo un interés en que el proceso constructivo se desarrollase con elementos de sostenibilidad en su ejecución.

Arcos de hormigón que son más de lo que parecen

El proyecto “Casa Montecito” -que posee una superficie de 1.300 m2- demoró siete años en llevarse a cabo y se “incrustó” en un sitio de 1,5 hectáreas ubicado entre las montañas de Santa Inez y el Océano Pacífico, en las afueras de Santa Barbara, California.

Los arcos parabólicos de hormigón, además de definir la fachada de la casa, se transformaron en el punto focal de todo el proyecto. Esto, porque la entrada principal a la edificación, formada por una parábola de cristales enmarcados dentro de un tubo de hormigón, para Robin Donaldson se configuró como una obra de arte en sí misma dentro del mismo proyecto.

Los arcos también sirvieron para transformar al techo de la “Casa Montecito” en una suerte de gran jardín, que se funde con el entorno de la casa. Esto, sumado a los paneles solares y la manera de encarar el diseño de mezcla del hormigón, además de sus espacios interiores, convierten a este proyecto en una interesante propuesta sobre cómo abordar el diseño arquitectónico de viviendas de hormigón de una manera sostenible, incorporando también elementos artísticos.

“Práctica y programáticamente, los propietarios necesitaban un lugar para apoyar sus actividad sociales y filantrópicas, además de sus florecientes actividades artísticas, al mismo que les proporcionara una sensación de privacidad. En ese sentido, al trabajar entre la escala monumental de la envolvente general y los espacios interiores, el diseño creó una articulación formal integral en el exterior y un flujo generoso en el interior”, destacó el estudio de arquitectura al portal Deezen.

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